Por la mañana nos despedimos con un gran abrazo de Vero, el
mismo que le daremos al Santo a nuestra llegada a Santiago.
Nos encontramos a la
salida de Cádiz asi qe en seguida hemos enlazado la vía Augusta. Antes de eso
subimos un puente y por primera vez siento el peso de las alforjas, que después
de 4 años había olvidado.
El recorrido a través de la pista era muy comodo ya que el
terreno estaba en muy buenas condiciones y era todo llano, saliendo de Cádiz
rápidamente. Así hemos llegado a San Fernando pronto, pero hemos salido de él
tarde; no porque fuera una gran urbe, sino porque la señalización era pésima.
Las flechas amarillas aparecían y desaparecían al instante y finalmente hemos
tenido que desistir en seguir el camino. Para poder salir hemos preguntado por
Puerto Real y tras continuar al lado de la vía del tren, al llegar a éste
volvemos a tener las mismas sensaciones: perdidos por la mala señalización. En
internet la Asociación Gaditana describe el camino y cuando ya lo habíamos
encontrado volvemos a perdernos, pero por suerte nos encontramos con un
ciclista, Juan Antonio, experto en estos terrenos. Nos explica el camino a la
perfección y tras ofrecerse incluso a acompañarnos finalmente con la
información que nos ha dado no es necesario. Volvemos hacia atrás y nos
dirigimos hacia la Universidad de Cádiz y luego hacia el parque de Guadaire,
una zona muy arbolada y con un sendero ideal para coger ritmo después del
tiempo perdido. Llegamos al río de San Pedro y lo atravesamos por un largo
puente de madera.
El Puerto de Santa María lo atravesamos sin problemos y nos
dirigimos hacia Jerez de la Frontera.
Después de Jerez el camino seguirá al lado de la autovía
para después adentrarse a través de caminos de cereales donde las perdices nos
han hecho el camino más agradable. Como ya viene siendo norma nos hemos vuelto
a perder llegando a través de una pista a una zona sin salida pero por suerte
al lado de la Nacional donde la hemos tomada en dirección hacia Las Cabezas de
San Juan. A los pocos kilómetros, primer pinchazo del camino, lo que nos
faltaba, ya que las ganas por llegar cada vez iban en aumento. A pesar de haber
recorrido más kilómetros hasta alcanzar el pueblo hemos llegado a las Cabezas
de San Juan donde vamos a hacer noche en un apartamento totalmente equipado y
en muy buenas condiciones, recomendable 100%.
Mañana nos dirigiremos a Sevilla, una de mis ciudades
favoritas. Esperamos llegar pronto y poder disfrutar al menos un par de horas
en ella.
A descansar!
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